martes, octubre 16, 2007

La cuenta atrás


Martes, 16 de octubre de 2007. Hacia las 4 de la tarde la directora de nuestra agencia de adopción llamó a mi mujer. A parte de comentarle varios proyectos en los que quería que colaboráramos (unas jornadas profesionales sobre adopción y una cena con gente del gobierno filipino el día 22 de noviembre) le comunicó que nuestra asignación estaba cerca.

¿Cómo que cerca?

Sí, mujer, que ya no queda nada - le dijo entre risitas.

Le comentaron a mi mujer que habían estado en Filipinas en septiembre y habían hablado de nuestro caso a las autoridades de allí. La directora veía muy dispuesta a las autoridades de allí a asignarnos cuanto antes un niño. Y eso fue todo.

Aquella noche apenas dormimos.

¿No le preguntaste de cuanto tiempo estábamos hablando? ¿Un mes? ¿Semanas?, le pregunté a mi mujer.

La noticia le había cogido tan desprevenida que no se le ocurrió preguntar nada. Al día siguiente llamaría yo a la directora para ver si le sacaba más información. está claro que sabía más de lo que me decía. Eso era evidente.

Nuestra indiferencia por la adopción se transformó, una vez más, en alegría incontenible. Rápidamente se dibujaron en nuestras caras una sonrisa de oreja a oreja que ya nadie nos podría borrar.

Nuestras mentes comenzaron a volar y en nuestros sueños siempre había la figura de un niño pequeño sin rostro. Estaba claro que el momento de acercaba.

El corazón se agitaba y ya no pararía hasta que la asignación se hubiera producido... Pum Pum




lunes, octubre 08, 2007

Nervios

Hasta ahora habíamos estado tranquilos. Después del tropezón de mayo-junio nuestro espíritu se serenó definitivamente. Durante el mes de junio abrimos nuevamente otra puerta, el último cartucho de acelerar el proceso, pero la cerramos de un portazo y enfadados.

De esta apertura de puerta no puedo, ni debo, ni quiero contar nada, de momento. Implicaría a demasiada gente. El caso es que algo que tenía toda la pinta de ser legal se convirtió en algo totalmente ilegal y digno de una película de suspense. Está claro que tengo que escribir un libro de todo esto. Del lado oscuro de la adopción.

No nos alteró demasiado. La serenidad volvió de inmediato. Desde entonces no hemos sentido la adopción como algo alegre. Lo hemos sentido con una simple y llana pasividad. Un cúmulo de ganas de que todo termine de una santa vez. Pérdida de interés. Pérdida de emoción. En definitiva, desencanto.

Se que toda esta actitud es totalmente normal. Forma parte del embarazo de "elefante" que estamos sufriendo y que cuando llegue nuestra asignación se olvidará todo. Esta actitud duró hasta hace pocos días.

Hace unas dos, tres semanas todo empezó a cambiar. Nos están llegando "señales de humo" de Filipinas que nos indican que el momento se acerca.

Llamamos aproximadamente una vez al mes al Ministerio filipino encargado de las adopciones. Tenéis 30 delante, tenéis 15 delante y hoy mismo nos han dicho que la cifra que tenemos delante es "insignificante". Nos aseguran que la asignación llegará antes de Navidad. Había en sus voces una serie de "risitas" que nos anuncian que el momento está cerca.

No quiero ilusionarme, pero es inevitable. No quiero pensar en ello, pero es inevitable. Quiero olvidarme del tema, pero no puedo. A pesar de todo hay que mantenerse en calma. Somos unos privilegiados. Apenas 9 meses en lista de espera no es nada (los hacemos el 25 de Octubre). Para una familia española, no me cansaré de repetirlo, serían cerca de 2 años. Nosotros, como ya he dicho muchas veces, tenemos la fortuna de ser un matrimonio mixto y al menos para ésto sirve y mucho.

Una semana, dos, cuatro, un mes, dudo que quede mucho más. Los nervios han vuelto a aparecer. Los sueños con niños empiezan a inundar mi cabeza.....y esta vez puedo decir que es la definitiva.

domingo, octubre 07, 2007

Comunidad Tulay



Se que no escribo nada. Se que mucho menos de lo que me gustaría, pero mi otro Blog me absorbe cada día más... y estoy encantado.

Comunidad Tulay se ha convertido en mi válvula de escape. Aunque es una página sobre adopción en Filipinas, curiosamente me ayuda a no pensar en "nuestro hijo". Contestar y ayudar a cientos de personas con las que me comunico me da una satisfacción personal que difícilmente puede explicarse. Cada día atiendo voces de socorro, de angustia y de preocupación de muchas familias que han pasado o están pasando lo mismo que nosotros o cosas mucho peores. Cada día me siento más alejado de mi trabajo y más cercano a las personas.

Oir sus palabras de agradecimiento son la mejor recompensa que podría esperar.



viernes, julio 27, 2007

El cuarto



El origen


Hace aproximadamente una semana nos llamaron de la tienda:

- Ya están los muebles ¿cuándo los mandamos?

¡¡¡Ya están!!!!!!!

La verdad es que fue una emoción enorme. Nos dijeron que tardarían como unos 3 meses. Que antes de Octubre no estarían.

Los muebles los encargamos un par de semanas después de nuestra gran crisis del mensaje anterior. Cuando llegué aquel día a mi casa me encontré a mi mujer llorando y metida en la cama a las 7 de la tarde. Fue uno de los días más duros que he vivido. Ese día me tocó hacer "de fuerte", aunque por dentro estaba destrozado.

Como ya me olía el percal, compré un ramo de flores, me enfundé en mi sonrisa más sincera y así me presenté delante de ella.

No pasa nada, ya verás como pronto nos asignan a nuestro hijo, ya lo verás. ¿Si quieres podemos ir mirando muebles? ¡Tú estás loco! me dijo, pero una leve sonrisa me indicó que iba por el buen camino. Sus lágrimas dejaron de caer por su rostro y poco a poco transformamos una profunda decepción y tristeza en una nueva ilusión por llenar poco a poco el vacío que dejó ese niño perdido.

Los siguientes fines de semana los dedicamos a mirar una y mil tiendas, a medir la habitación y a pensar como sería el cuarto de nuestro futuro hijo. Al final el 23 de junio nos decidimos por la tienda y por los muebles y así quedaron encargados. Todo ese tiempo sirvió para cicatrizar esa herida abierta por la pérdida de una niña que ya sentíamos como nuestra, pero la vida es así, a veces fácil y a veces muy difícil.

Mi mujer ahora está perfecta. Yo sin embargo desde aquel día no he podido dormir bien. No estoy nervioso, no estoy obsesionado con el tema, pero no consigo dormir. Afortunadamente los consejos de una buena amiga y unas cuantas pastillas surtieron efecto. Me imagino que cuando comiencen mis vacaciones a mediados del mes que viene, todo se olvidará poco a poco y recupere mi ritmo normal de sueño, pero por ahora la cosa es muy diferente. Es curioso como tus pensamientos más profundos van por un lado y tu cuerpo por otro. Sueño con niños, con pérdidas, con dolor y a veces con un niño alegre que me mira a los ojos.

Durante este tiempo abrimos otra ventana, otra posibilidad para agilizar todo, pero se cerró de golpe, con fuerza y sin ninguna posibilidad. No nos rendimos. Esa puerta la habíamos abierto por la vía legal, cosa que parece que no les gustó. A su vez ellos nos propusieron algo totalmente ilegal, escandaloso y que me guardo para mí. Cerramos la ventana inmediatamente y asunto olvidado. Seguimos y seguiremos intentándolo cuantas veces sean necesarias....cosas de tratar con un país del tercer mundo.... y cosas de conocer gente allí.

Las subidas y bajadas de carácter se suceden cada vez con más frecuencia, por cualquier cosa, por cualquier motivo, pero nuestro amor, nuestras fuerzas son tan pesadas y tan constantes como esos cambios de temperamento.

¿Cuánto nos queda? No sabemos. Si todo va bien antes de navidades tendremos noticias, pero ¿Cuánto tiempo antes?....ni idea.

El pasado fin de semana lo dedicamos a desmontar la habitación que durante cerca de 5 años fue nuestro estudio, nuestra cueva de pensar, nuestra sala de ordenadores. Fue un trabajo agotador. Parece mentira la cantidad de "mierda" que se acumula en tan sólo 5 años.


Nuestra vida, nuestra Historia... por los suelos

Cuando dejamos la habitación vacía recuperó el viejo eco que tenía toda la casa cuando llegamos. Fue un momento emocionante.


El vacío

Ayer jueves llegaron los muebles por la mañana. Yo estaba en la oficina. Pasé todo el día pensando en como quedarían. Cuando llegué a eso de las 8 no había nadie en casa, pasé a la habitación y una vez más me emocioné. ¡¡¡Estaba preciosa!!! Aunque todavía queda mucho por colocar, comprar, pintar y añadir, la esencia ya estaba ahí. La impronta de lo que será algún día ya está. Sólo falta lo más importante, un pequeño detalle de nada.... nuestro hijo.


El resultado



Me enamoré de esta mesa, escritorio, pizarra, atril todo en uno... nadie sabe las ganas que tengo de usarlo de una santa vez....


viernes, junio 01, 2007

Día "D".....Hora "H"



* 9:21 de la mañana. Al final dormí mejor de lo que esperaba. Isabel se despertó a las 4 de la mañana y ya no pudo dormir. Ahora mismo estoy histérico, nervioso, miro al teléfono cada 2 segundos en busca de una señal que de momento no llega.

* 10:36:......seguimos sin noticias. Son las 16:36 en Manila......ya estarán con ella...

* 11:28: .....sin noticias. Son las 17:28 en Manila.......

* 11:43: .....al final.....no pudo ser.....no era para nosotros. Los informes médicos han sido contundentes. La niña está mal, al borde de la deficiencia y dudan que pueda alcanzar si quiera ir a la escuela....Evidentemente la decisión está tomada y ya hemos llamado a la Agencia pra decirlo.

Ahora viene lo duro, los remordimientos por decir que no, que queremos un niño sano. Un niño que al menos a priori sea normal. Lo siento por ese pequeño ángel filipino. Al menos ya tiene un informe médico completo y exacto y la familia que finalmente la adopte sepa a que atenerse.

Una total y absoluta decepción....

Ahora a esperar nuestra verdadera asignación que no creemos que tarde mucho en llegar...

Isabel está destrozada y muy muy enfadada... que difícil está siendo todo esto.







miércoles, mayo 30, 2007

Novedades II



Ayer, pro primera vez dormí mal. No fue premeditado, simplemente surgió. Los sueños con esa niña se repiten cada vez con más frecuencia y a la mínima, el insomnio hace acto de presencia. Mi mujer lleva así desde el viernes pasado y con el estómago destrozado. Yo empecé ayer con ardor. Afortunadamente el viernes sabremos ya bastantes cosas y esperemos que las suficientes como para tomar una decisión al respecto.

Cada mañana, nada más levantarnos lo primero es revisar el correo. ¿Qué novedades nos vienen desde Filipinas? El tener una diferencia horario de 6-7 horas y el tener unos horarios laborales totalmente distintos, ocasionan un sin fin de problemas. El caso es que durante la mañana recibimos la mayor parte de la información.

Novedad del día:

La Directora del Orfanato afirma que ella cree que el diagnóstico que le hicieron a la niña era erróneo y que espera con ilusión las pruebas a las que vamos a someter a la niña. Nos ha pedido una copia de ese diagnóstico a lo cual nosotros hemos aceptados encantados. ¿Suena bien verdad?

Nicole recogerá a la niña el viernes al mediodía (noche del jueves en España), con su marido, una amiga y una supervisora del Orfanato y la llevarán a los dos hospitales donde le harán las pruebas. Me imagino que el viernes por la mañana (hora de España) tendremos al menos las primeras impresiones, aunque sean "visuales".


martes, mayo 29, 2007

Novedades


La verdad es que las últimas 24 horas han pasado muy deprisa. Dudo mucho que la cosa continúe así. Si al final decidimos que sí, dudo que el tiempo vuele como hasta ahora. Se ralentizará hasta hacerse insoportable. Isabel ya ha empezado con dolores de estómago que dudo se le pasen rápido.

Hace apenas unas horas hemos hablado con la prima de Isabel en Manila (Nicole). Ya ha hablado con los médicos y con el Orfanato. Los médicos dicen que es mejor hacer las pruebas en el Hospital y el Orfanato no ha puesto ningún impedimento.....uffff....menos mal. Allí le podrán hacer más analíticas y de más relevancia que una mera inspección en el Orfanato.

El próximo viernes 1 de junio, Nicole y su marido recogerán a la niña en el Orfanato y la llevarán a un Hospital privado para que los distintos médicos le hagan todas las pruebas que estimen oportunas. Irá también una amiga de Nicole, que hace un par de años adoptó en Filipinas un niño con algunos problemas y que ahora está perfecto. Entiendo perfectamente que la responsabilidad que tiene ahora Nicole es mucha y quiera compartirla con alguien....pobrecita, no me cambiaba por ella. Esa amiga suya ha pasado por todo esto y puede darle otro punto de vista sobre como se encuentra la niña.

Poco más. El viernes cuando nos despertemos seguramente habrán acabado las pruebas, y aunque quizá tarden unos días en dar el informe, al menos sabremos la impresión que le ha causado la niña a Nicole. Ella será de muchísima ayuda en la decisión que tendremos que tomar.

Apenas sabemos nada de esa niña. No hemos querido saberlo. Cuando el viernes pasado la persona de contacto de la Agencia nos leía su expediente mis ojos instintivamente trataban de mirar por encima de las hojas y ver su cara, pero algo me decía que era mejor no hacerlo, y así ha sido.

Esta mañana se conectó Nicole al messenger y no pude evitarlo:

* ¿Qué edad tiene?

- Un año y diez meses

Mayor de lo que esperábamos, pero la verdad, ahora todo eso carece de importancia. Dentro de poco, dentro de muy poco, es posible que seamos padres y ya todo dará igual.

Carta a un hermano desaparecido





Esta carta la empecé hace tiempo, pero nunca logro terminarla, de ahí la diferencia de fechas y tiempos, en cualquier caso la dejo tal y como la he ido escribiendo.

Querido Flap,

Hace ahora tres días (6 de abril de 2007) que te fuiste y no consigo quitarte de mi cabeza. Te veo en todos los sitios a los que miro, porque estabas y compartías cada rincón de nuestras vidas. Te fuiste desde el sitio que más querías y donde más disfrutabas, nuestra casa de Asturias, y puedo asegurarte que nuestras vacaciones de Semana Santa terminaron el pasado viernes, en el mismo momento en que decidiste dejarnos. Para una familia tan pequeña como la nuestra, éramos cinco contigo, habitando en una casa tan grande y tan llena de recuerdos acumulados por los que nos precedieron, tu ausencia se volvió insoportable. Tus voces altisonantes, tus acogidas tan fuera de tono cada vez que nos veías, tu perpetua simpatía hacia todos, tus cariños que llegaban a empalagar, tus constantes ganas de jugar y de salir a la calle justo cuando estábamos durmiendo la siesta o tomando el sol y sobre todo tu eterna compañía, nunca la olvidaremos.

Sabes que cuando llegaste, papá te tomó como el nieto que todavía no ha llegado y no como el hijo que eras. Siempre te aprovechaste de esa circunstancia y supiste explotar a nuestros padres hasta convertirte en un perfecto maleducado, pero todo eso es ahora agua pasada, ya que en mi cabeza sólo hay sitio para los buenos momentos.

Te recuerdo una y mil veces en nuestros paseos al borde del mar, por la playa o por la montaña. Te recuerdo saltando en esos campos asturianos donde la hierba nos llegaba hasta la cintura y donde tú más disfrutabas. Te recuerdo dinámico, fuerte y hablando sin parar una y mil veces hasta hacernos enfadar de pura desesperación... si supieras cuanto lo hecho de menos llorarías como yo lo hago cada vez que repaso esta carta una y mil veces.

Al menos me queda el consuelo de que a nuestro lado SIEMPRE fuiste feliz. Lo más feliz de nunca alguien como tú pudo jamás imaginar. Nunca te faltó de nada y en estos días cuando guardaba todas tus cosas nos dimos cuenta aun más de esto. No pasaste ni un sólo día de tu vida sin la compañía de alguno de nosotros cuatro. Ni un día.

Han sido trece años, 11 meses y unos días de entrega mutua. Y aunque ahora que ya no estás es fácil decirlo, te echo tanto de menos que me duele sólo el echo de pronunciarlo.

Tu partida era esperada desde hacía tiempo. Apenas cumpliste los 13 años empezaron los achaques que más o menos venías arrastrando de lejos. Una incipiente ceguera, problemas de oído, corazón, pero sobre todo ese sangrado cada vez que ibas a hacer pis y que tanto nos desesperaba a todos. Fuiste el mejor enfermo que familia haya deseado nunca. De tu boca jamás salió un lamento o una cara larga. Todo fue alegría y ánimos hacia nosotros. Y así fue hasta el último segundo de tu existencia.

El viernes 6 de abril se precipitó todo. No podías hacer pis. A pesar de eso insistías en ir a la calle, en jugar, en hablar a gritos y en acompañarnos a todos lados. Nunca pensamos que ese soleado día sería el último para tí. Una vez más te llevamos al médico. Ese lugar que tanto odiabas y que te hacía temblar de pies a cabeza. Ya nunca saldrías de ahí. Tu vejiga estaba llena de coágulos y aunque tú no lo demostrabas la doctora decía que estabas sufriendo, que lo único que podía hacer por tí era darte calmantes.

Papá no quería hacerlo. Te quería a su lado a toda costa. Yo tuve que tomar las riendas y hablar por todos. Necesito saber que fue la decisión que tomé fue correcta. Cargaré con ella el resto de mi vida, pero creo que fue la más acertada. Aunque aparentemente estabas bien, tu cuerpo por dentro empezaba su final.

Tal y como sucedió siempre te recordaremos alegre, contento y lleno de amor hacia todos nosotros. La despedida fue muy dura. Quizá uno de los momentos más duros de mi vida. Tu familia como podías ver y sentir era un mar de lágrimas. La doctora te cogió en brazos y yo a duras penas pude quitarte la correa y darte un beso... las lágrimas me impedían verte.

Papá le imploró a la doctora que todo fuera rápido, lo más rápido que pudiera. Nos alejamos de la clínica sin mirarnos y pensando lo que había pasado. repasando mentalmente todos los momentos buenos que nos habías dado. Aquella misma mañana estabas con nosotros y apenas 4 horas después ya no estabas.

Cuando volvimos a casa y se lo dijimos a mamá no se lo podía creer. Un grito desgarrador traspasó todas las paredes de la casa y sólo pude abrazarla para tratar de consolarla.

Han pasado ya un par de meses, pero te seguimos viendo en cada rincón de la casa. Te veo, te siento y te huelo por todas partes.

Me hubiera encantado, hubiera deseado que conocieras a mi futuro hijo. Tener una foto de los dos. De dos de las personas más queridas por mí. Una que fue real durante 14 años y otra que lo será dentro de poco tiempo. Pero no pudo ser. Te quisiste ir antes y ante eso nada se puede hacer.

En cualquier caso mi hijo conocerá el profundo amor que tu familia tenía por los de tu especie. Amará y respetará cada ser viviente de este planeta en el que nos ha tocado vivir, y estoy seguro que igual que yo no olvido a otros "hermanos" de mi padre y de mi madre que nunca conocí, él tampoco te olvidará.

Estés donde estés, nunca te olvidaremos. Hasta siempre.

Que la tierra te sea leve.


lunes, mayo 28, 2007

Calma


Después de la tormenta llega la calma. La calma en el proceso de adopción supone asumir que hay que ser cautos. No dejarse llevar. Todavía no sabemos nada aunque nuestros corazones nos digan otra cosa. Es demasiado tiempo esperando, demasiadas ganas como para contener nuestras mentes. En cualquier caso estamos mucho más calmados.

Hace diez minutos hemos enviado faxes y correos electrónicos y esperemos que la "maquinaria filipina" se empiece a movilizar (aunque allí son ya las 4:30 de la tarde). Confiamos en que esta misma semana la prima de mi mujer y los médicos puedan ir a ver a la niña y luego ya sólo queda esperar su decisión, que será también la nuestra.

Estamos durmiendo mejor aunque preguntas como ¿Necesitará algo? ¿Qué nombre le ponemos? no hacen más que atormentar nuestros debilitados cerebros.

Calma, cabeza fría y mucha paciencia me repito una y otra vez. Hemos aguantado mucho y podemos seguir esperando unos días más.

domingo, mayo 27, 2007

¿Seremos ya tres?





Hace apenas 72 horas han ocurrido una serie de cosas que "puede" que cambien totalmente nuestra vida. Todo empezó el 24 de mayo, exactamente 1 día antes de cumplir 4 meses en lista de espera para la asignación de nuestro deseado hijo.

Jueves 24 de mayo de 2007, 12:03 PM

Suena el teléfono de mi móvil. Un número desconocido me llamaba insistentemente. Lo cojo,

- ¿Enrique?

* Sí, soy yo.

- Soy..... de la Agencia.

En aquel momento mi corazón me dio un vuelco. Sería para cualquier tontería. No puede ser. Es demasiado pronto, no puede ser.

- Te llamaba porque quería comentaros una cosa, necesitaría veros cuanto antes.

Su voz era seca, aséptica, con aire de indiferencia, sin alegría, sin pena, en todo caso preocupación. Dicha preocupación se transmitió de inmediato a mí.

* ¿Qué ocurre? ¿Pasa algo?

- Bueno, preferiría decíroslo en directo. Hay un niño, no se si os interesará, tiene alguna cosa, no se...

* ¿Cómo que un niño? ¿Ya nos han asignado un niño?

- No, no. Esto viene por otro cauce. Todo legal, pero viene por otro lado. Es mejor que os lo explique en directo ¿Cuándo os puedo ver?

* Pero ese niño ¿está muy mal?

- No, no, pero tiene alguna cosilla. No se como suelen reaccionar los futuros padres ante esto y nunca se como explicarlo. Mejor os lo cuento cuanto antes.

* Pero si no lo aceptamos, ¿Seguiremos en lista de espera? ¿No retrasará nuestra asignación sino lo aceptamos?

- No, no. Por eso no te preocupes. Esto sigue otros conductos.

Mi cabeza giraba y giraba sin sentido tratando de comprender todo lo que me estaba diciendo. ¿Había llegado ya el momento? Habíamos especificado que queríamos un niño sano ¿A qué viene esto? ¿Están jugando con nosotros?, esto no se hace. Si ya es duro afrontar el proceso de adopción, presentarte a un niño que puedes o no puedes aceptar es aún más duro.

* Muy bien, llamo a Isabel y te llamo inmediatamente.

No sabía ni por donde empezar. Se lo cuento tratando de quitarle peso. Tratando de recalcar que no pasaba nada, que sino lo aceptamos no influía nada en nuestra lista de espera, pero pasó lo que tenía que pasar. Se echó a llorar, y así continuó durante dos o tres largas horas en donde su único consuelo fueron sus compañeros de trabajo ¿Cómo nos hacían esto? ¿Con qué cara rechazaba yo a un niño que tenía "algo"? Son personas humanas, no objetos.

En cualquier caso el proceso de adopción es así. A veces frío, a veces cálido y a veces como en este caso tremendamente injusto.

Jueves 24 de mayo, 12:30 PM.

Llamo a la Agencia y quedamos a las 7 de la tarde del mismo día.

Después de mucho tirar de la lengua consigo sacarle que se trata de una niña. Una niña, dios mío. Lo que siempre deseamos y creíamos que no sería posible ya que en Filipinas hay una proporción abrumadora de niños. ¿Cómo nos hacen esto? Porque juegan con nosotros, con nuestros sentimientos.

Ahora sólo sirve una cosa, tranquilidad. Evidentemente ese día no hice nada en la oficina. Hacía clic con mi ratón de vez en cuando. Mi cabeza volaba. Mi cabeza estaba en Asturias. Mi cabeza unía mi mano al de una niña en esa playa que tanto deseo compartir con ella. Una niña sin forma, sin rasgos, pequeña y poco más. Fue imposible parar ese pensamiento durante todo el día. ¿Qué le pasará?

Siempre pensé que este momento sería muy diferente. Como muchas de otras familias a las que conocemos llegaría deprisa, con mucha alegría y en seguida lo contaríamos al mundo entero, pero en este caso ¿Qué podíamos contar?, ¿Que a lo mejor sí o a lo mejor no? si fuera lo segundo la caída sería mucho más grande. Sólo a los más cercanos.

1ª llamada. A mi eterno confidente en temas de adopción, que fue contundente y llena de emoción. Es ella, sé que es ella, lo presiento, lo se. Pero por si acaso, no la mires, no veas su foto. No leas su expediente. Cuanto menos sepas mucho mejor. No crees lazos con alguien que quizá no sea, aunque se que es ella.

Mi corazón dio otro vuelco y mis lágrimas no pudieron más.

A duras penas realizo mi segunda llamada. A mi madre. Trato de explicarle pero es difícil de hacer entender estas cosas. Su nerviosismo le impidió respirar ese día y dudo que todavía se le haya pasado.

Y ahí quedó la cosa. Nadie más lo sabe. Nadie más. No quiero difundir una alegría que quizá no sea. No quiero que nos animen, que nos den ánimos porque sé que luego las caídas son aún mucho peores y además en soledad.

A duras penas consigo comer unos bocados. Tengo un nudo en el estómago que lo impide. Apenas leo el periódico que es mi fiel compañero en mis comidas. Mis ojos miran a las líneas de papel, pero mi cabeza está dibujando otra historia bien diferente a miles de kilómetros de distancia. No puedo pararlo, es inevitable.

Decido irme a las 5 de la tarde. No tiene sentido. No estoy haciendo nada. Tomo los transportes más lentos, escucho la música más triste y trato de llegar a tiempo a la cita en la Agencia.

Llego con una hora de adelante. A las 6.

- ¿Ya estás ahí? Me dice mi mujer por teléfono... y se ríe.... Por primera vez en el día la encuentro algo más relajada. Paseo para hacer tiempo y las 6:30 subo a la Agencia.

A las 6:45 llega mi mujer. Nos miramos. Su cara es un poema. Tiene los nervios a flor de piel y sólo una mirada es suficiente para hacerla llorar. Trato de calmarla y hacerme el fuerte y aparentemente lo consigo.

Por fin llega el momento. Viernes 24 de mayo de 2007. 7 PM

Nos pasan a una sala y enseguida aparece nuestra persona de contacto con una sonrisa de oreja a oreja. Nuestras caras serias e inexpresivas. A la espera. Mi mujer lista a saltarle a la yugular para decirle que esto no se hace así... ese momento afortunadamente nunca llegaría.

La niña es una menor de dos años. Está en un orfanato a las afueras de Manila y tiene lo que podríamos denominar un retraso psicomotriz (bajo tono muscular). Apenas nada. En China hubiera pasado desapercibida. Hubiera sido una niña normal, pero en Filipinas no. En Filipinas lo detectaron y le pusieron un fisioterapeuta. Nos entregan dos informes de septiembre de 2006 y febrero de 2007 donde se aprecia la mejoría. Gateaba. En cualquier caso está en la lista de niños con dificultades especiales y eso asusta mucho.

Una asistente social filipina llamó a la asistente social del orfanato de una tía de Isabel y le contó el caso. Le preguntó si conocía alguna pareja interesada. Ella inmediatamente pensó en nosotros. La niña apenas lleva unos días en la lista y no debemos preocuparnos. Si decimos que no, no pasa nada. Tendrá padres inmediatamente. ¿Queremos seguir adelante? Sino queremos no pasa nada. Llevamos muy poco en lista de espera y en unos meses nos asignarán otro niño.

¿Qué hacer? Nuestro corazón pudo más pero con condiciones. Nosotros tomaríamos las riendas del tema. Un familiar nuestro iría a verla y llevaría a médicos para que la hicieran pruebas exhaustivas. De eso dependerá nuestra decisión. Sólo de eso. Somos unos cobardes y queremos un hijo sano. Todo lo sano que podamos preveer. Pensaron en nosotros ya que teníamos la posibilidad de verla. En eso quedamos con la Agencia.

Desde ese momento no hemos parado. Esa misma noche reunimos a mis padres y se lo comunicamos. Apoyo total y totalmente de acuerdo en la decisión. Mi mujer llama a su amiga del alma que no puede contener los gritos de emoción.

- ¡¡¡Es ella, Isabel!!!, estoy segura. Nuevos lloros.

Estamos agotados. Aún así llamamos a una tía de Isabel y nos da los contactos de dos médicos en Manila de total confianza. Un pediatra y un neurólogo infantil. Ellos, junto con una prima de mi mujer serán los encargados de decidir. De ser nuestros ojos y nuestro corazón. Difícil labor la verdad.

Llamada a una pediatra española de nuestra confianza en España. Le leemos el informe en inglés. Su respuesta no puede ser más contundente. Lo que tiene esa niña no es NADA. Esa niña no tiene nada que no se cure con amor y rehabilitación. Aun así sentimos miedo. Mucho miedo.

Aquella noche del jueves fue terrible. Yo apenas dormí 3 horas y mi mujer ni eso. Se levantó a las 5 de la mañana del día 25 para empezar la ronda de llamadas con Filipinas (por la diferencia horaria) con las que planificar todo. Desafortunadamente hasta el lunes o martes no se podría hacer nada. Un dato sacamos en claro de la nueva información que nos dieron. La niña ya andaba por ella misma. Eso es un muy buen dato.

Hoy es ya domingo. La cabeza no ha parado todo el fin de semana. ¿Cómo estará? ¿Cómo será? ¿Estará bien atendida? ¿Será realmente nuestra hija? Tiene nariz chata. Es lo único que sabemos y ese dato es suficiente para completar el resto de su cara. Un esbozo que la cabeza compone una y mil veces en mil y una combinaciones.

He de reconocer que la cosa pinta muy bien. Pero hay que tener la cabeza y el corazón frío. Aunque la aceptemos, posteriormente lo deberá aceptar el Orfanato y el Ministerio filipino (ICAB). Aunque dudamos que eso sea un impedimento.

Mientras tanto nuestras cabezas no paran de soñar, de correr, de volar y de amar a un ser pequeñito que quizá nos está ya esperando a miles de kilómetros de distancia. ¿Nos sentirá como nosotros ya la sentimos a ella? ¿Seremos ya tres?


domingo, febrero 18, 2007

Tiempos difíciles

A veces resulta difícil saber cuando empieza un período difícil, aunque en el fondo de nuestro corazón sepamos a ciencia cierta que realmente es una buena época.

Como ya he comentado en alguna ocasión, en adopción todo son sobresaltos, nerviosismo, prisas y malentendidos. Quizá ahora el período "nerviosismo" sea el que más pueda definir nuestro estado de ánimo.

Cuando volvimos de nuestro viaje a Filipinas, nos enteramos por nuestra Agencia, que el día 13 de noviembre pasado había salido nuestro expediente para Manila. Todo indicaba que con un poco de suerte entraríamos en la lista de espera del año 2006, pero la suerte no estaba de nuestra parte en esta ocasión.

Al ser enviado por un servicio urgente, no creo que tardara más de 4-5 días en llegar nuestro expediente a Manila y más en concreto a las manos del representante de nuestra agencia en Filipinas, que para colmo de casialidades es familiar directo nuestro...todo pinta bien, ¿verdad?... pues NO.

Nuestro expediente no entró en el Ministerio que tenía que entrar hasta el día 28 de noviembre... apenas unos días, ¿verdad? ¿Qué importancia tiene?... Cuando estás esperando que tu hijo llegue lo antes posible, cualquier pequeño detalle es total y absolutamente importante. El tener, como es nuestro caso, muchísima más información que la gran mayoría de familias que inician su proceso de adopción, tiene sus ventajas y desventajas. La desventaja es que cualquier pequeño retraso, que en cualquier otro caso se puede disimular con cualquier excusa, aquí no vale. ¿Por qué tardó nuestro familiar una semana en llevar el experiente al ministerio correspondiente?... nunca lo sabremos y por supuesto no le diremos nada. Pero quizá, eso pudo ocasionar que no nos aprobaran nuestros papeles hasta unos días después del comienzo del año 2007.

Definitivamente en Filipinas tienen un ritmo de trabajo totalmente diferente al nuestro. Será el calor, la humedad o la carencia de prisas que cada vez nos "estresan" más en Occidente, el caso es que allí se vive de otra forma. Da igual que un asunto importante dependa de un familiar tuyo, da todo igual. El término prisa es un concepto muy alejado de sus mentes. Con "confiar en Dios", es suficiente...(sin comentarios).

Si a eso añadimos que a mediados de diciembre nos enteramos que una íntima amiga nuestra iba a ser mamá por segunda vez, la tristeza tuvo el campo abonado para irrumpir en nuestras vidas. Es curioso, pero todavía nos afecta enterarnos de que amigos nuestros van a ser papás. Es curioso, me alegro por ellos, pero la eterna frase de ¿Por qué yo no puedo? siempre está ahí y me imagino que me acompañará toda la vida.

Uno y uno son dos y el resultado es que han sido sin lugar a dudas las navidades más tristes que hemos pasado. No había una razón de peso. Pero fue así. Ha sido la primera Navidad en mi vida que me he sentido solo. Notábamos que nos faltaba algo a nuestro lado. Tres años intenado tener un hijo y nada, otro año más con tratamientos de fertlidad y nada. Sólo ahora, cuando todo está ya muy cerca, los nervios, los enfados, nos hicieron no disfrutar de un período del año que nos encanta. Hubo muchos regalos, como siempre, pero nos falta algo. Algo pequeño que esperemos que las próximas navidades esté ya con nosotros.

El 25 de enero y ya con los nervios de punta, recibimos la tan esperada noticia. Nuestro expediente ha sido aprobado y entramos en lista de espera. Desde el 25 de enero de 2007 el contador se ha puesto definitivamente en marcha y cada día queda un poco menos para reunirnos con nuestro hijo, que seguro seguro ya ha nacido y está esperándonos en alguna de de las 7105 islas que tiene Filipinas.

Hubo algún pequeño problema, como que los tutores que habíamos escogido vivían en Filipinas y ellos exigían que fuesen españoles, pero todo esa ya está solventado.

Según chivatazos que hemos recibido, en nuestra lista de espera, (familias con antecedentes familiares filipinos), tenemos unas 200 personas por delante y están asignando unos 15 niños a la semana... suena demasiado bien. Si esto fuera cierto, en nada nos tendrían que avisar, pero ya conocemos la poca seguridad que pueden tener estas noticias y me niego a ponerme más y más nervioso al ver que el tiempo pasa y no recibimos noticias. Mi corazón dice que queda poco tiempo, pero mi mente no quiere creerlo y así seguirá hasta que nos llegue la tan ansiada noticia.

Algo que no quería está pasando. Miramos los escaparates de las tiendas de niños y una sonrisa se dibuja en nuestras caras. Una felicidad contenida durante demasiado tiempo que intenta abrirse camino en nuestro cuerpo pero que nos resistimos a dejar pasar hasta que llegue el momento.

Mientras tanto hemos empezado a mover fichas al más alto nivel. Nuestro familiar en Filipinas, lo dejaremos tranquilo, de momento. Otro pariente ya está movilizándose con contactos internos en el gobierno filipino, otro en el ministerio que lleva los temas de adopción, y nos llegan noticias de que algún orfanato hará lo que sea para emparejarnos con alguno de sus pequeños "cuando llegue el momento". No se que saldrá de todo esto. Quizá nada. Ya empiezo a conocer la "parsimonia" filipina. Pero no me puedo quedar parado.

Se que somos unos privilegiados. Se que si fuésemos una familia española normal, nos esperaría, a partir de ahora, una larga espera de 2 años. Pero no lo somos. Se que por ser mi mujer filipina los tiempos de espera son infinítamente más cortos, pero ¿Que haríais vosotros por un hijo vuestro si pudiéseis hacer algo?

lunes, enero 22, 2007

El regreso del autómata

Con mucho mucho trabajo y cada vez más centrado en el blog de adopción, hoy os traigo una curiosa noticia que espero que inaugure el regreso definitivo.

Lo que podéis ver en el vídeo es el que puede denominarse como el primer "autómata" de la Historia. Fue fabricado alrededor del año 1772 y escribe cualquier carácter en cualquier lengua, funcionando gracias a una rueda con la que se seleccionan los carácteres a escribir y se almacenan en una lista, pudiendo así escribir frases completas. Una vez activado, el autómata escribe sobre el papel, y además sigue el texto con los ojos, moja la pluma en el tintero y la sacude para no manchar el papel.

Está compuesto por 6.000 piezas fabricadas manualmente y se tardarón 6 años en terminarlo. Algunos de sus gestos son púramente humanos, y se acerca a la perfección para lo que se podía tener en el siglo XVIII.




En el siguiente vídeo podéis ver un poco como funciona por dentro.