miércoles, diciembre 22, 2004

La envidia sana


Mi primer sueldo coincidió más o menos con unas navidades de hace no se cuantos años. Lo primero que compré fue un estupendo árbol de Navidad de más de 2 metros de altura. Hasta entonces teníamos uno pequeñín que parecía un simulacro de abeto.

Se lo dejé a mis padres con la condición de que cuando me independizara el árbol viajara conmigo.

Han pasado tres años desde que me casé y el susodicho árbol sigue con mis padres y yo tengo ahora el simulacro de abeto con los viejos adornos. ¿Se diferencian verdad?

La verdad es que si pusiera esa maravilla de árbol en casa tendría que vivir entre sus ramas.

Cada objeto, tiene su lugar en el mundo y ese súper árbol pertenece a ese lugar concreto de la casa. Ya nadie ni nada puede moverlo de allí.

lunes, diciembre 20, 2004

Cansado de comprar



Estoy cansado de regalar siempre lo mismo. Siempre las mismas cosas, que en el fondo no se si le gustará al interesado. Navegando por la red he encontrado el regalo perfecto. Un poco caro, eso sí, pero perfecto. Regalar una estrella. Cada día se descubren cientos de estrellas nuevas y cada una de ellas pueden llevar nuestro nombre... me parece algo maravilloso y además eterno.

¿Os gusta la imagen? yo la encuentro ¡genial!

viernes, diciembre 17, 2004

A propósito de mi perro...


El otro día, Miss Anjali, comentaba a propósito de la foto de mi perro: “tu perro es divinooooo! dan unas ganas locas de acariciarlo si parece de peluche todo acolchadito!”. Quería hacer unos breves comentarios al respecto:

Mi querido perro, se llama Flap, tiene ahora mismo 11 años. Sólo deciros una cosa…las apariencias engañan. Desde que nació y hasta hoy se ha comido:

1.- La puerta de casa varias veces. Primero estaba acolchada y la devoró. Luego dejamos la madera vista…la devoró (todavía recuerdo sus dientes llenos de astillitas…¡que horror!). Pusimos una plancha metálica por dentro de unos 50 cm. de altura que evidentemente no devoró, pero se ponía de pie y comía la puerta a partir de los susodichos 50 cm. Ahora la puerta parece un búnker con una plancha metálica de más de 1 metro de altura.

No sólo se comió nuestra puerta. Una vez se nos ocurrió dejarlo solo en casa de mis abuelos…ni os cuento lo que ocurrió.

2.- Una tapicería de unas butacas, en casa de mis padres, que había hecho mi bisabuela en punto de cruz ni se sabe cuando…la devoró. Todavía recuerdo los gritos de mi madre.

3.- Es un perro superlisto, le encata la lectura. Saca de las librerías todos los libros que quedan a su alcance, ahora tenemos que enseñarlo a ponerlos en su sitio.

4.- Los zócalos son su debilidad. Si veis uno sin morder os regalo la casa.

5.- Hemos decidido llevarlo al circo ya que abre las puertas de casa y también las del coche. Todo iba bien hasta que un día comíamos en un restaurante y apareció el susodicho perro. Habíamos aparcado el coche a más de 500 metros del restaurante.

6.- Es un portento, ¡No tiene vértigo!. Una vez en nuestra casa de Asturias lo vimos subido al tejado. Debe ser que quería mirar al mar, salió por la ventana del piso superior y se pasó allí más de dos horas. Casi tuvimos que avisar a los bomberos ya que no había forma humana de hacerlo bajar de allí.

7.- No puede ver a ninguno de su especie, por lo que siempre va atado. Todavía recuerdo cuando se tiró a un mastín, le agarró del cuello y no había manera de que soltara al pobre perro. ¡Casi lo ahoga!


Todo este lío empezó un año después de que se muriera mi primer perro, un cocker spaniel. Mi padre decidió que estaba cansado de perros tranquilos y aseguraba que necesitaba uno más espabilado. Mira que le dijimos que en el libro ponía que los fox terrier son muy nerviosos…no hubo forma.

Once años después seguimos enamorados de aquel precioso cachorro de 2 meses, que encandiló a toda la familia con sus gracias. Once años después sigo queriendo a mi perro como el primer día.

Después de once años seguimos sacrificando nuestro tiempo para pasearle 4 veces al día y rehacer posibles vacaciones para que no pase ni un solo día sin nosotros... su familia.

Todos estos sacrificios los seguiremos haciendo hasta el día en que nos deje. Le daremos todo lo que podamos porque él nos lo devuelve con creces cada día. Quien tenga perro sabe de lo que estoy hablando ¿verdad?

jueves, diciembre 16, 2004

El abrazo



Ella vive en Filipinas. Hace doce años que no se ven. Ayer por la tarde asomó su cabeza, con timidez, por la puerta y una sonrisa iluminó su cara. Se acercaron lentamente, se miraban, estudiaban el paso del tiempo en sus cuerpos, y todo acabó en un abrazo.

Un abrazo eterno, sincero y mezclado con lágrimas de alegría. Yo miraba desde una esquina emocionado y contento de ver como mi mujer recuperaba en un minuto doce largos años de silencios, de errores y de malentendidos.

¡Me encanta la Navidad!

miércoles, diciembre 15, 2004

Recuerdos de un Puente Maravilloso




El sonido y el olor del mar al despertarse...











Pasear entre un muro de naturaleza...










Un fuego y el calor de mi perro...











Una buena comida en compañía de tus amigos...











Pero, sobre todo, disfrutar cada uno de los momentos anteriores con la persona que más quiero en este mundo.






¿Se puede pedir algo más?

viernes, diciembre 10, 2004

Este resfriado es un Rollo







Estoy que no puedo conmigo mismo. Aunque tengo ganas de escribir y mostrar fotos de mi querida tierra...no puedo.
Lo único en lo que pienso es en acabar el trabajo e irme a casa.






jueves, diciembre 09, 2004

Los Chicos del Coro



Bajo el título del post se esconde una gran película. Aunque suene un poco ñoño, aunque parezca la típica película de Navidad destinada al público infaltil, aunque huela a comedia facilona, las apariencias engañan.

El pasado jueves fuimos al preestreno de la misma algo escépticos y nos encontramos con una buena película, sin quererlo ni beberlo. Todo un alegato en favor de la educación, de la buena educación. Un guiño a tantos y tantos profesores y educadores anónimos que se dejan la piel en tratar de poner un poco de sentido en la cabeza de nuestros hijos.

Seguro que todos tendréis en la cabeza el nombre de ese profesor que os dió ilusión, alegría y motivación. Yo al menos lo tuve, sólo uno, pero me acuerdo de él muchas veces y sus consejos los llevo metidos en mi corazón.

En definitiva, una película simpática, alegre, divertida y mucho, mucho más cercana a nosotros que la archiconocida "El Club de los poetas muertos".

Os la recomiendo, seguro que os gusta. Ya me contaréis.....

viernes, diciembre 03, 2004

De vuelta a mi tierra



Quedan solo unas pocas horas para meterme en una caravana y llegar a nuestro remanso de paz, nuestro campamento de invierno.

Necesito ver las montañas, el verde, la lluvia, la chimenea y abrir la ventana de mi cuarto y ver el azul del mar.

Necesito oler el mar, la hierba mojada, la leña quemándose y la comida cocinada a fuego muy lento.

Necesito sentir el viento en mi cara y mi mujer muy muy cerca todas las horas del día.

Necesito pasear con mi perro por un bosque sin fin encima de un acantilado.

Necesito leer un libro de un tirón, sin horarios, sin prisas.

En definitiva, necesito salir del frenético Madrid.

Ya os iré contando


jueves, diciembre 02, 2004

Cena de Navidad


Me acaban de comunicar que la cena de Navidad de este año es el día 17. Ya estoy temblando y me explico. Éste es el único día del año es que puedes ver a tus jefes supremos haciendo toda sarta de idioteces y borrachos como cubas. Para mí, al menos, es un espectáculo bochornoso.

El mismo "tipo" que un día te hecha una bronca y te pones a contar las horas que te quedan para que te larguen a la calle, lo tienes a tu lado, pegado al oído, con un olor a alcohol que tira para atrás, diciéndote lo bueno que eres y las esperanzas que tienen puestas en ti. Tú encima aguantando el chaparrón estoicamente por si las moscas.

Éste es mi primer año, por lo que los veteranos ya me han indicado diplomáticamente que los novatos tenemos el deber de sentarnos a la mesa al lado de los jefes. ¡No saben ellos ni nada!

A estas cenas, de supuesta confraternización, las cogí ya fobia en la Universidad. Estuve vinculado a una de ellas durante muchos años y todavía recuerdo las borracheras de los profesores en los "supuestos viajes de estudios". Era algo dantesco. En más de una ocasión tuvimos que llevar a alguno a rastras hasta la habitación. ¿Cómo pretenden que luego les respetemos?

Desde entonces he tenido muy claro que hay que separar el ocio del trabajo y sino queda más remedio que unirlos, al menos mantener las formas. Si encima eres "jefe" la responsabilidad es aún mayor. No soporto ese supuesto supercompañerismo-amigismo con cenas, comidas y salidas nocturnas, cuando luego te despiden sin ningún remordimiento y sin volver a saber de ellos en tu vida.

miércoles, diciembre 01, 2004

2046


El pasado sábado fuimos a ver una de esas películas que te dejan clavado en la butaca del cine. “2046” es la continuación de “deseando amar”, sin duda alguna, una obra maestra y una de los mejores films de los últimos 10 años.

2046 sigue en la línea de “Deseando amar”. Una fuerza visual que sólo este director sabe captar, unos diálogos casi inexistentes, un ritmo lento y muy pausado, y el amor perdido como argumento único de la película.

La música, al igual que en “Deseando amar”, juega un papel fundamental. Rodea cada historia hasta hacer de cada una de ellas algo único y personal.

Se os grabará a fuego una leyenda que de tanto repetirla termina formando parte de uno mismo:
“Cuenta la leyenda que hace tiempo, cuando la gente tenía un problema, hacía un agujero en un árbol y susurraba el problema al árbol. Luego tapaba el agujero del árbol con barro. El problema se resolvía y del barro brotaba una flor.”

Esta imagen aparecía en “Deseando amar” en Angkor, el mayor templo religioso del mundo. No me quito la imagen de mi cabeza.

Si os gustó “Deseando amar” esta película no os defraudará. Pero si no os gusta el cine Chino ni os lo planteéis, saldréis enfadados y con el sentimiento de haber tirado el dinero.

Solo para espíritus muy sensibles.